El fondo de inversión Transición busca comprar empresa

David J. Jacq, socio fundador de TRANSICIÓN (http://www.transicion.es/), es de origen canadiense, aunque lleva más de 10 años en España trabajando en empresas familiares. En estas empresas, la relación de cercanía que tenía con los empresarios ha sido la que despertó sus ganas de emprender un proyecto propio. Pero no busca emprender desde cero. Para ello creó TRANSICIÓN, un “search fund” o un fondo de inversión que busca adquirir una única empresa para tomar el relevo y hacerla crecer de manera sostenible.

En 2016, después de completar el MBA del IESE, consiguió el apoyo de más de 15 inversores españoles e internacionales para encontrar una empresa, posteriormente adquirirla y convertirse en el CEO de la misma. Entre sus inversores destacan los hermanos Cabiedes, inversores de startups y dueños la agencia de noticias Europa Press.  Otros inversores de TRANSICIÓN son León Bartolomé, inversor privado y exgestor en BBVA & Partners, y William P. Egan, inversor estadounidense que dirige las firmas de capital riesgo Alta Communications y Marion Equity Partners, y que es accionista del equipo de la NBA Boston Celtics.

Actualmente las oficinas de TRANSICIÓN están en Barcelona, donde David trabaja con su equipo, aunque el horizonte de búsqueda de TRANSICIÓN es toda España. Desde hace poco también cuenta con un analista permanente en Valencia, porque es un mercado muy interesante para TRANSICIÓN. “Formamos parte de la Asociación de Jóvenes Empresarios de Valencia con la intención de conocer el ecosistema empresarial valenciano”, declara David.

El modelo que sigue TRANSICIÓN es diferente al de un fondo de inversión porque una vez comprada la empresa, ésta se liquidará y David dedicará el 100% de su tiempo a la gestión de la empresa adquirida. Según David, “mi intención es integrarme al equipo directivo como CEO y estaría involucrado en el día a día e la empresa reportando al consejo de administración de la empresa compuesto por algunos de los inversores de TRANSICIÓN”.

TRANSICIÓN no tiene sectores favoritos o específicos a los cuales se enfoca. Según David, para que la empresa sea interesante debe tener un beneficio mínimo antes de impuestos de 750.000 €, con márgenes superiores al 10 % y una diversificada cartera de clientes.

“Lo primero es identificar por qué quiere vender el empresario. Buscamos que sea por razones ajenas a la empresa; por ejemplo, jubilación, falta de sucesión, cansancio, centrase en un nuevo proyecto, etc. Segundo, buscamos que la empresa tenga una cierta estabilidad a nivel de ingresos (clientes) y rentabilidad, pero que al mismo tiempo tenga proyección de crecimiento a medio plazo.”

Hay expertos que señalan a los emprendedores como David como la posible solución a los problemas de sucesión de las empresas familiares españolas. Él mismo admite que no es la solución a los problemas de sucesión, pero es parte de la solución. “Hay mucha gente joven que, como yo, sueñan con retomar el mando de estas empresas. Nuestro modelo, permite dar la credibilidad necesaria para entrar en conversaciones con estos empresarios. Los inversores son claves en conseguir esta credibilidad, sobre todo con el respaldo no solo económico sino también a nivel de know-how.”

El lema de TRANSICIÓN es “comprar y hacer crecer una empresa”

Según el CEO de TRANSICIÓN, en estos momentos está habiendo un cambio generacional muy importante en la sociedad y todavía más fuerte en el tejido empresarial español. “Muchos empresarios no tienen una sucesión planificada, y al mismo tiempo están empezando a pensar en la próxima etapa de la empresa y no la quieren dejar en cualquier mano porque es como una hija más. TRANSICIÓN es una de las soluciones a este tipo de situaciones”. “Soy un buen partido”, dice David riéndose.

David ha llamado a su fondo TRANSICIÓN porque piensa que no puede llegar a la empresa y hacer las cosas mejor que el antiguo gestor, tiene que haber un proceso de “transición”, de entre uno y dos años, en el que el antiguo empresario forme al nuevo directivo.

“Deseo seguir con la construcción de un gran negocio como el suyo, a largo plazo, sin horizonte de desinversión y de forma sostenible. Dado que voy a adquirir solamente una empresa, es mi política mantener la identidad de la compañía, su ubicación, el equipo y el método de operación. El lema de TRANSICIÓN es “comprar y hacer crecer una empresa” supone construir sobre el legado de otro empresario, respetando sus valores y su cultura organizativa.”