Una horchata con Virginia Sánchez

Se llama Virginia Sánchez y cree que cada persona es dueña de su futuro, aunque algunos lo tienen "más fácil que otros simplemente por haber nacido en el seno de una familia o en un país". Lleva el emprendimiento en la sangre, y a los 7 años ya jugaba a montar negocios para sacar dinerillo (vender tartas a su familia, hacer pulseras y venderlas, ensayar obras de teatro y cobrar la entrada...). De pequeña, cuando le preguntaban qué quería ser de mayor, contestaba “rica”, pero ahora que puede expresarlo mejor, en realidad lo que quería era libertad financiera para tener libertad de elección. Competitiva (no quería perder ni al parchís), muy trabajadora y exigente consigo misma (sacar un 9,75 era una mala nota) hasta que decidió que quería tener una visión más amplia del mundo en lugar de ser muy buena en dos o tres cosas.

Si tuviera que definirse en una frase, sería aprendedora emprendedora. “Soy muy prudente y era muy perfeccionista, aprendí a andar o a montar en bici sin caerme, cosa que es malo para el emprendimiento porque quita velocidad”. Se dedica a ayudar a emprendedores a montar negocios de éxito, y se implica como si el negocio fuera suyo. Disfruta de lo que hace y ahora aún más ya que busca que esos negocios sean sostenibles y contribuyan a tener un mundo mejor. Le encanta su trabajo porque tiene que estar al día de las innovaciones y la tecnología (estudió teleco), pero además “me permite cada día aprender de las personas, que son la clave del éxito”.

Este año se ha propuesto dar forma y procedimentar el Social Venture Builder de Zubi Labs, y arrancar startups que impacten positivamente en al menos un millón de personas. Ser capaz de dar una ponencia en inglés sintiéndose tan segura como en español y seguir “sacando del armario” a mujeres emprendedoras. Le encanta explorar modelos de negocio, aprender, leer para aprender, jugar al pádel, bailar, jugar en general y más si puede ganar :-)

 

Un libro:

Relacionado con el emprendimiento, The four hour work week por el mindset.

De lectura, La vieja sirena de Jose Luis Sampedro.

 

Un disco:

Buff, todos, depende del momento.

 

Una película:

Guess who's coming to dinner.

 

Un personaje que te haya marcado:

Mi madre :-)

 

Una ronda:

Con mis clientes a ser posible. Si no, con alguien alineado en objetivos y valores.

 

Un inversor:

Cabiedes, Derbaix o Megías dicen cosas que me parecen muy razonables, de sentido común.

 

Un CEO:

Carlota Pi.

 

¿Cuál ha sido la mejor decisión que has tomado a nivel profesional?:

Hace tiempo, dejar de hacer lo que se esperaba de mí para pasar a hacer lo que sentía que debía y quería hacer.

 

¿Y personal?:

Irme a vivir un año con mi abuela cuando mi abuelo falleció, para que no estuviera sola. La disfruté muchísimo, en realidad, el favor me lo hizo ella a mí.

 

Una comida:

Un buen chuletón casi crudo y con sal gorda. Lo que sea con nutella.

 

Un bar o restaurante de tu ciudad:

Saborearte (Gandía).

 

Un sitio para reunirte:

Cualquiera en el que haya un buen postre.

 

¿Con quién te tomarías un café?:

Con cualquier empresari@ que quiera compartir su historia.

 

¿Y un vermut?:

No me gusta el alcohol.

 

¿Con quién conversarías off the record tomando una horchata?

Contigo Tere Doménech! jaja