Hablemos sobre la energía

Cuando de energía eléctrica se habla todos nos tocamos el bolsillo. Y es que cancelar cada factura sin duda es peso en nuestro presupuesto. Por eso, si quieres ahorrar dinero y mejorar la eficiencia energética en el hogar no te pierdas este artículo.

¿Que es la eficiencia energética?

Lo primero que debemos saber es en qué consiste la eficiencia energética. Cuando nos referimos a ella hablamos de la optimización del consumo u ahorro de energía. Esto se logra ajustando los niveles de consumo de electricidad, con la implementación de diferentes mecanismos tanto a nivel general como individual.

Beneficios del ahorro energético

Son muchas las mejoras que se logran con el ahorro de energía. La principal es la reducción de costos en la factura de electricidad, lo que se traduce en un ahorro financiero tanto para el estado como para las familias.

Por otro lado, la reducción de gases contaminantes y el efecto invernadero es un beneficio para el medioambiente que vale la pena. La implementación de nuevas tecnologías tanto en el hogar como en las industrias simplifica los procesos y reduce el consumo de energía.

A largo plazo los beneficios pueden aumentar, con la mejora del medio ambiente mejoraría la calidad del aire, la salud y las condiciones ambientales serían más favorables.

¿Cómo se calcula la eficiencia energética?

Existen diversas normas por las cuales se rigen estos cálculos. Sin embargo, como consumidores, a la hora de elegir un aparato eléctrico debemos fijarnos en el consumo que este tiene. Para ello existe una escala, la cual les explicamos a continuación:

La escala va desde la A hasta la D, siendo la A la de menor consumo y la D la de mayor consumo. Por lo general la A está en color verde, la B amarillo, la C naranja y la D en rojo, indicando así su grado de consumo.

Por otro lado, las A poseen ciertas variaciones, las más comunes son A+, A++ y A+++, y estos son sus porcentajes de Ahorro:

• A+ un 10% de ahorro de energía

• A++ un 16% de ahorro

• A+++ un 50 % de ahorro de energía

Teniendo esto presente al momento de comprar algún aparato, sea de refrigeración o calefacción, debemos fijarnos en las etiquetas, de esta forma nos aseguramos de elegir uno de bajo consumo.

Por otro lado, existen formas sencillas de ahorrar energía, como cambiar las bombillas a luz led, aislando la vivienda y los edificios de empresas y aprovechando al máximo la iluminación natural en espacios grandes. De estas y muchas otras formas podemos ahorrar energía.