Cómo afrontar el aspecto de la contratación empresarial

Nosotros, como personas que ejercerán la principal labor de coordinación y supervisión en calidad de CEO, ya que somos quienes decidimos crear la pyme y somos los visionarios que saben cómo y cuándo quieren el proyecto de negocio, confiamos en nosotros mismos en ese sentido. Como mucho delegamos en una segunda persona de confianza si la idea ha sido conjunta.

Pero cuando contratamos, debemos tener en cuenta que la persona que entra a nuestra empresa va a asumir una serie de tareas y competencias en las que nosotros no podemos interceder. Debemos ser conscientes de que, además de empleados, son humanos, y necesitan un período de adaptación a su trabajo y a la ideología de la marca.

Pero, en última instancia, la formación inicial que prestemos a los primeros empleados que contratemos va encaminada a lo mismo: conseguir que sean autónomos y que nosotros podamos dejar de hacer su trabajo. Invertir dinero o préstamos online inmediatos en una persona a la que apenas conocemos guiándonos «solo» por su currículum no es fácil.

Su currículum, en cualquier caso, es la primera radiografía que tenemos de esa persona. Lo mejor es acudir a portales de internet, como Infojobs o LinkedIn, ya que son fáciles de actualizar y podremos informarnos de sus últimos empleos sin excepción alguna.

Además, nos facilita pedir referencias a las empresas o negocios para los que haya trabajado antes, un paso previo imprescindible si queremos que crezca nuestra confianza.

Pero la prueba de fuego será la entrevista de trabajo. Las preguntas elaboradas no deben ser trampas malintencionadas, puesto que tal vez solo consigamos poner nerviosa a la persona y que no muestre todo aquello de lo que es capaz. Debe sentirse cómoda con la empresa.

Las preguntas, eso sí, han de ser numerosas y lo más precisas posibles, y deben ir encaminadas a solventar todas nuestras dudas. Si la persona nos inspira una impresión positiva, podremos invertir microcréditos en ella sin temor.